Segunda Oportunidad. Historias de quiebre y de reconstrucción

La vida de Martín Fabio ,conocido por todo el mundo como el Mono de Kapanga, tuvo mucho, quizás demasiado rock and roll. Kapanga es una de las bandas más auténticas de nuestro país, ir a verla es sinónimo de diversión. Como su líder, que escucharlo siempre te saca una sonrisa. Esta es la historia del Mono, quien un día se desmayó jugando al futbol y se despertó en el hospital. La droga lo había puesto entre la espada y la pared. Él pudo salir y tener otra oportunidad, ¡al fin!. También logró renunciar al mandato familiar.

Fue madre muy joven y eso le explotó la cabeza. A sus 16 años su hermano la ayudo a contar un abuso intrafamiliar. Muchos años después se despidió de esa niña que crió de joven, cuando tuvo un ACV, pero siguió adelante. Años después fue internada en una clínica psiquiátrica, de donde estuvo “de viaje de egresados” y volvió a salir. La historia de Mariela Fernandez, una reconocida mujer de los medios merece ser escuchada porque es pura lección de cómo nos podemos sobreponer cuando la vida aprieta una y mil veces más.

Roberto Sánchez es el proyecto de moda de Andrés Baglivo, que la rompe en Instagram. Enamoró a artistas como Emmanuel Horvilleur, Duki, pasando por Tini Stoessel, Cristian Castro y Katy Perry. El mundo del ascenso: de viajar 4 5 horas el colectivo y tren, lo cambio por el aire acondicionado y el shopping. La infancia y adolescencia las vivió en Villa Madero, un lugar realmente humilde pero hermoso, dice él. Roberto Sánchez. El proyecto artístico y negocio comenzó como un local de ropa vintage, con chombas Adidas en cajas de los 80s y otras reliquias. Y ahora lo eligen en todo el mundo. Cómo llegó es una gran historia.

María Virginia Godoy, más conocida como “Señorita Bimbo”, creció en una familia de artistas, pero para ella era una casa de gente mayor. Su mandato no era profesional sino emocional, y una adopción rara que ella misma tiene pensado investigar. Víctima de todos los prejuicios, logró hacerse un lugar en base a romper los estereotipos sociales, donde “te sacan los sueños”, pero ella los va logrando materializar en base a resistir.

Darío Silva pone siempre cuerpo y mente al servicio de las más conocidas arengas de la creciente movida del freestyle en habla hispana. Con aspecto de luchador cool y rotulado por procedencia geográfica, creció en Misiones en una casa de chapa. Soñaba con ser un pastor religioso como su papá. Participó en un reality y quedó afuera por muy poco. La calle lo formó. La separación de sus padres le despertó una inevitable rebeldía que lo hizo experimentar el oscuro mundo de la droga. El presentador de batallas más importante de Latinoamérica, también tocó fondo y volvió a empezar.