Las chicas del cadillac

Dentro del cosmos musical que es Granada, hay una constelación que brilla intensamente: la familia Morente. Destacar entre tanto talento no es fácil, pero con valentía y personalidad Soleá Morente ha sabido labrarse un camino propio, con mucha personalidad. Desde su infancia en el Albayzín, entre pucheros compartidos con Patti Smith o Carlos Saura, a su amor por los libros y su faceta como locutora o presentadora. Un viaje a flor de piel desde Graná al Rastro de Madrid para descubrir a una mujer que, sin duda, es de otro planeta.

Que un secuestro te puede salvar la vida lo sabe Marta Jiménez Serrano. La escritora, autora de la novela Los nombres propios y el libro de relatos No todo el mundo, aprovecha que le subimos a la parte trasera de nuestro Cadillac para huir de Argentina, ¿por qué? Nos explica esto, nos habla de su relación con los gatos, nos habla de música y escritura y tratamos de responder la gran pregunta: ¿qué es el amor? Solo respuestas imperfectas.

Regresar a la infancia, recuperar los recuerdos de cuando era niño y gastaba los días en la calle. La tienda de juguetes de su padre, la música de Perales con la que bailaba su madre. El músico se sube a la parte de atrás de este viejo Cadillac para viajar por el pasado, el presente y el futuro de toda una vida. Nos habla de sus ídolos, de las canciones que escucha con su hija y de una colaboración muy especial.

Su melena leonina le ha acompañado toda la vida. Un despliegue capilar que de niño le hizo convertirse en el mejor imitador de Eugenio de su colegio. También le dió por marcarse un Camarón. Pasado el tiempo, se dejó llevar por grandes como Battiato. Ahora nos ofrece un viaje de las playas del Sardinero a Madrid.

El pequeño de una familia numerosa siempre sale rebelde, pero con cara de bueno. La misma cara con la que nos cuenta que hacía pellas y que no era muy buen estudiante. Afortunadamente, la música llegó para rescatarle. Empapado por los discos que le dejaban sus hermanos. Militante del rock, su banda Sidecars (junto a Ruly y Gerbas) ha caminado con el paso firme hasta romper el Wizink. Un viaje desde el Gruta 77 a la plaza de Alameda de Osuna. Redes: TW e IG: @Sidecarsrock