Escucha GRATIS estos episodios de True Crime

Los habitantes de Chicago se enorgullecían de no tener que cerrar las puertas de sus casas, pero cuando la policía encontró el cuerpo descuartizado de la pequeña Suzanne Degnan en varias alcantarillas, ningún cerrojo quedaba abierto de noche.

Soy Jane Britton y mi cuerpo apareció en mi habitación en extrañas circunstancias: tapado con una sábana y rodeado de un polvo rojizo. Mi futuro como arqueóloga se truncó cuando tenía 24 años con una muerte violenta y repentina. Hoy vamos a dar respuesta a esa pregunta que tanto atormentó a mis seres queridos durante 48 años: ¿Quién es mi asesino?

Un divorcio, insulina y una herencia multimillonaria. Parecen ingredientes sacados de una película de sobremesa de la tele. Pero la historia que nos ocupa es tan real como su ilustre protagonista, y está, como veremos ahora, lejos de terminar. El Caso Mainat estalló el uno de octubre de dos mil veinte, cuando se hizo público que Ángela Dobrowolski, de treinta y siete años, había sido acusada de tratar presuntamente de asesinar a su marido, el multimillonario productor Josep María Mainat, inyectándole insulina mientras dormía. Los hechos ocurrieron en la madrugada del veintidós al veintitrés de junio, y cada día que pasa aparecen detalles más inverosímiles.

En mayo de 2021, se reabrió el caso Helena Jubany al descubrirse en su disco duro elementos que conducen a investigar a un nuevo sospechoso. Bruno Pérez Juncá es el perito forense informático que ha hallado estas pruebas. ¿Qué esconde el ordenador de Helena Jubany?

Nació en una de las familias más antiguas y adineradas de Transilvania y aún ganó más poder con su casamiento. Eran suyas las tierras y todo lo que había en ellas y lo usó como su sadismo dictaba, torturando y asesinando a 650 muchachas vírgenes para bañarse en su sangre.