Reflexiones de un cristiano como tú...

Una reflexión basada en el consejo de Jesús, según Mateo 18:2-4...para llegar al cielo, tenemos que ser como niños.

Toda bendicion viene de Dios,  esta debe ser altamente valorada y nunca desperdiciada...para no desperdiciar la bendicion, tenemos que renovar nuestros odres.

Nuestro compromiso con Dios debe renovarse a diario, debe ser lo primero que hagamos cada mañana y la desición más importante de cada día.

La oración, además de aportar a una relación cercana y de confianza con Dios; sirve como válvula de escape para nuestra alma.

Dos características necesarias en la vida de aquel que quiera ser usado para la gloria de Dios.