Mentira Histórica: Caso Colosio

En este último episodio, Laura detalla los mecanismos a través de los cuales el poder construye sus mentiras, utilizando la propia voz de Mario como prueba de las injusticias y contradicciones que se cometieron en su contra. A pesar de ser ínfima frente al Sistema, la periodista comienza a iluminar la verdad y hace posible que la causa de Mario se reabra y que su condena se revise, para que Mario pueda tener otra navidad en familia, después de casi 30 años de cárcel por un crimen que, él insiste, no cometió.

Laura viaja a la infancia y juventud de Mario Aburto, un hombre al que la prensa de aquel 1994 pintó casi como un demonio pero que, en palabras de quienes realmente lo conocieron, parece ser más la presa que del monstruo, la mentira histórica que detuvo su vida para siempre ese 23 de marzo.

Laura descubre que contestar todas sus preguntas no será nada, pero nada fácil. El expediente del caso Colosio está bloqueado y su lectura está prohibida a todo mexicano y mexicana hasta 2035. Pero, hecha la ley, hecha Laura, la periodista se convirtió en la primera persona en ver, leer y oír la investigación oficial.

Laura se pregunta por Colosio, la víctima del delito y uno de los protagonistas fundamentales de la historia de México: un hombre nacido y criado como un joven del PRI en los privilegios de una clase más acomodada que la de su padre, que se hizo amigo del archifamoso y multipolémico presidente mexicano Salinas de Gortari, fue funcionario de su gobierno y terminó como su sucesor a la presidencia: ¿Por qué alguien lo querría matar?

La búsqueda de Laura la lleva a su propio pasado, específicamente, a su primer trabajo como recepcionista de un famoso casino de Tijuana frecuentado por empresarios y políticos del partido más poderoso de México y uno de los más grandes del mundo: el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ¿Qué tuvo que ver el PRI en la muerte de Colosio? Laura se remonta a la mismísima Revolución Mexicana e intenta responder esta pregunta.