Ni en tu casa ni en la mía

Nerea y Javi, por fin, se sinceran. No os perdáis qué deciden hacer una vez sus cartas quedan al descubierto. ¿Seguirán jugando? ¡Aquí llega el desenlace de ‘Ni en tu casa ni en la mía’! Un final en el que seguro que saltarán chispas.

Nerea se despierta junto a un documento firmando de su puño y letra: un acuerdo que la compromete a adquirir 50 inmuebles por el valor de treinta millones de euros. Pero aún hay más, el Notario la espera en unas horas para efectuar la compra-venta. ¿Qué hará Nerea? Consejo: Nunca firméis nada bajo los efectos del alcohol. Nunca.

Hoy es su primera cita de verdad. La primera vez que se verán fuera de un piso. Los dos solos. ¡La cena promete! Pero los nervios harán de las suyas. Los nervios ¡y el vino! Y empezarán a salir verdades que ninguno de los dos esperaba. Justo cuando Nerea cree que Javi se le ha sincerado del todo, ocurrirá algo que lo volverá a poner todo patas arriba.

Javi le acaba de regalar un anillo. ¿Es un anillo de compromiso? Es obvio que Javi quiere algo más de ella, ¡por supuesto que sí!, y Nerea está a punto de descubrirlo. Pero tal vez no es lo que ella se espera. Sin duda tanta mentira terminará por explotarle a la cara. Nerea aún está a tiempo de pararlo todo. Ahora bien, ¿querrá hacerlo?

Si Mahoma no va a la montaña, la montaña va a Mahoma. Como Javi no le coge el teléfono, Nerea se inventa una excusa para poder volver a verlo: ¡decide hacerse pasar por una inversora multimillonaria! ¿Se seguirá negando a reunirse con ella cuando descubra su nueva identidad? Y lo más importante: ¿hasta cuándo podrá Nerea sostener la mentira?